¿Qué son las llantas todo terreno?

Los neumáticos todo terreno o llantas all terrain son la elección correcta si es un aventurero que también valora la practicidad. Están hechos para proporcionar un rendimiento equilibrado en situaciones más difíciles, como barro, grava y pequeñas rocas, así como en carreteras asfaltadas. En esencia, son el intermediario ideal entre los neumáticos todoterreno y los de carretera.

¿Para qué son?

Estos neumáticos son perfectos para las personas que quieren conducir en una gran variedad de condiciones y que no se ciñen a un único estilo de conducción. Los neumáticos todoterreno son ideales si pasa los fines de semana viajando al campo o a la montaña pero pasa la semana conduciendo por la ciudad. Le ofrecen la flexibilidad de no necesitar neumáticos nuevos cada vez que viaje por un tipo de superficie diferente.

¿Cómo están hechas?

La creación de neumáticos todoterreno es todo un arte. Estos neumáticos se fabrican para que sean resistentes y duraderos. En general, el caucho utilizado en su producción es más grueso y más resistente a abrasiones y cortes. Otra característica distintiva es la banda de rodadura, que tiene un diseño más agresivo con bloques más grandes y surcos más profundos para ayudar a expulsar materiales como la nieve y el barro con más éxito y manejarse mejor en una variedad de terrenos.

¿Cuando se usan?

Los neumáticos todoterreno son ideales si conduce con frecuencia por carreteras que atraviesan bosques, desiertos, montañas o incluso regiones invernales. Sin embargo, para justificar su uso no hace falta ser un explorador extremo. Además, son ideales para los días de ciudad con nieve o lluvia, en los que tener más tracción puede mejorar significativamente tu comodidad y seguridad al conducir. 

Ventajas

  • Versatilidad: Capaz de operar en una variedad de terrenos y condiciones de la carretera.
  • Durabilidad: Diseñados para soportar la dureza de terrenos irregulares, sobreviven a los neumáticos de carretera en circunstancias extremas.
  • Tracción mejorada: Pueden agarrarse con mayor firmeza a terrenos irregulares gracias al diseño de su banda de rodadura.
  • Comodidad: Evita tener que sustituir los neumáticos en función de las condiciones meteorológicas o del terreno.

Mantenimiento preventivo de llantas

Como todo el mundo sabe, un coche no puede moverse sin sus neumáticos, lo que los convierte en uno de los componentes más cruciales.

Dado que los neumáticos van perdiendo sus prestaciones y características a medida que se desgastan con el paso del tiempo, es fundamental realizar inspecciones frecuentes de su estado. Lo mejor es verificar su estado y descartar posibles problemas o anomalías con una periodicidad mensual o, al menos, trimestral.

En lo que respecta al mantenimiento preventivo de los neumáticos, hay cuatro aspectos clave en los que pensar:

  • Inspección

Se recomienda que un profesional examine la banda de rodadura para asegurarse de que existe un desgaste normal en ellos y las válvulas para descartar cualquier daño potencial, incluyendo astillas, grietas y cortes.

  • Alineación

Como hemos comentado anteriormente, el servicio de alineación es crucial para evitar el desgaste irregular de los neumáticos. Cuando se instalan neumáticos nuevos, se debe realizar la alineación; mejor aún, cuando hay una separación de más de 1,5 mm entre dos ranuras.

  • Presión de inflado de los neumáticos

Mantener la presión adecuada de los neumáticos no sólo le mantiene seguro, sino que también evita que se desgasten más rápido y consuman más gasolina. Se recomienda comprobar la presión al menos una vez a la semana.

  • Rotación

Al rotar los neumáticos, se modifica su posición para favorecer un desgaste más uniforme. Lo ideal es montar los neumáticos más nuevos en la parte trasera del vehículo y rotarlos aproximadamente cada 10.000 kilómetros.

Además de realizar un mantenimiento preventivo, debemos esforzarnos por mantener unas prácticas de conducción adecuadas y, por supuesto, tener en cuenta que un neumático suele tener una vida útil de cinco años o hasta cincuenta mil kilómetros, lo que ocurra primero.